El mundo de la música lamenta la partida de Chuck Mangione, el aclamado músico y director de orquesta de jazz, cuya vida y obra dejaron una huella imborrable. Mangione, ganador de varios premios Grammy y conocido por su inesperado éxito top-cinco en 1978 con el instrumental de jazz “Feels So Good“, ha fallecido a los 84 años, según un comunicado en su sitio web oficial. Su distintivo sonido del fliscorno resonó en millones de hogares, convirtiéndolo en un nombre familiar y llevando el jazz a audiencias masivas.

Nacido en Rochester, Nueva York, el 29 de noviembre de 1940, Mangione comenzó su trayectoria musical a temprana edad, actuando y grabando como los Mangione Brothers junto a su hermano, el tecladista Gaspare “Gap” Mangione. Después de graduarse de la prestigiosa Eastman School of Music en su ciudad natal, perfeccionó su arte como trompetista. Tuvo el honor de tocar con la legendaria banda de Art Blakey, los Jazz Messengers, así como con varias otras agrupaciones. Un hito en sus inicios fue la grabación del álbum “Friends & Love…A Chuck Mangione Concert” con la Orquesta Filarmónica de Rochester en 1970, un trabajo que ya mostraba su capacidad para fusionar géneros y emociones.

Del Jazz Puro al Estrellato Pop

Jazz musician Chuck Mangione dies at 84 - UPI.com

La notoriedad de Mangione creció exponencialmente con las subsiguientes grabaciones de sus composiciones. En 1975, lanzó “Chase the Clouds Away”, un álbum que obtuvo la certificación de oro de la RIAA y cuya canción principal fue utilizada prominentemente en la cobertura de los Juegos Olímpicos de Verano de 1976. Su talento fue reconocido con un premio Grammy en 1977 por la pieza “Bellavia”, consolidando su reputación en la escena del jazz.

Pero fue su álbum de 1977, también titulado “Feels So Good“, y su pegadiza canción principal, lo que lo catapultó al estrellato y lo convirtió en un nombre conocido en todos los hogares. La pista, que destacaba el virtuosismo de Mangione con el fliscorno, respaldado por su cuarteto de toda la vida —compuesto por el guitarrista Grant Geissman, el bajista Charles Meeks, el multiinstrumentista Chris Vadala y James Bradley Jr. en la percusión—, alcanzó el puesto número 4 en la lista de sencillos Billboard Hot 100. El álbum, por su parte, se elevó hasta la posición número 2 en la lista Billboard 200, que abarca todos los géneros, siendo superado únicamente por la icónica banda sonora de “Saturday Night Fever” de los Bee Gees. “Feels So Good” fue un éxito rotundo, obteniendo la certificación de doble platino de la RIAA por ventas que superaron los dos millones de unidades.

Legado y Reconocimientos

Chuck Mangione, of 'Feels So Good' and King of the Hill Fame, Dead at 84

Tras el arrollador éxito de “Feels So Good”, Mangione continuó produciendo música. En 1978, lanzó la banda sonora del filme de Anthony Quinn “Children of Sanchez”, un álbum que obtuvo la certificación de oro y cuya canción principal le valió a Mangione su segundo premio Grammy. En 1979, el álbum “Fun and Games”, también certificado oro, incluyó el sencillo “Give It All You Got”, que fue utilizado por ABC en su cobertura de los Juegos Olímpicos de Invierno de 1980 y recibió dos nominaciones al Grammy. A lo largo de su carrera, Mangione acumuló un total de 13 nominaciones al Grammy, incluyendo sus dos victorias.

A lo largo de su prolífica carrera, Chuck Mangione grabó alrededor de 30 álbumes, siendo el último de ellos “Everything for Love”, lanzado en el año 2000. Aunque su popularidad general pudo haber disminuido después de su apogeo en la década de 1970, Mangione permaneció como un referente en la cultura pop hasta bien entrado el siglo XXI. Demostrando su sentido del humor y su capacidad de reírse de sí mismo, prestó su voz para un papel recurrente en la aclamada comedia animada de televisión “King of the Hill”, donde interpretaba una versión exagerada de sí mismo, tal como aparecía en la portada del álbum “Feels So Good”.

En 2012, Chuck Mangione fue honrado con su inducción al Salón de la Fama de la Música de Rochester, un reconocimiento a su trayectoria y su impacto. En esa ocasión, el músico compartió una reflexión que encapsula su filosofía artística: “Si eres honesto y tocas con amor, la gente se sentará y escuchará… mi música es la suma de todo lo que he experimentado”. Su legado perdurará, no solo en sus grabaciones, sino en la inspiración que supo transmitir a través de su arte y su fliscorno.