Roberto Gómez Bolaños, mundialmente conocido como Chespirito, fue mucho más que un comediante; fue un genio creativo que, con su inigualable imaginación, dio vida a personajes que marcaron la infancia de millones de personas en todo el mundo. Desde “El Chavo del 8” hasta “El Chapulín Colorado”, sus creaciones no solo generaron risas, sino que también transmitieron mensajes de amistad, bondad y valores positivos. Sin embargo, detrás de la figura alegre y optimista que proyectaba en pantalla, existía un hombre con sus propias batallas y arrepentimientos. En la que se conoce como su última entrevista, Chespirito abrió su corazón para confesar uno de los errores más grandes de su vida, una “estupidez” que, a pesar de sus esfuerzos por subsanarla, ya había dejado una huella imborrable en su salud.

La recién estrenada serie “Sin Querer Queriendo”, que se puede ver en HBO Max, ha ofrecido una mirada más íntima a la vida de Roberto Gómez Bolaños. La ficción lo retrata como un hombre trabajador, sumamente exigente con cada una de sus creaciones y profundamente preocupado por el bienestar no solo de su familia, sino también de sus compañeros de trabajo. La serie también subraya su férrea adhesión a sus principios, especialmente su compromiso de emitir siempre mensajes positivos y de evitar cualquier tipo de señalamiento o estigmatización en sus historias y personajes.

Una Lucha Silenciosa: La Adicción al Cigarrillo

Uno de los aspectos más notorios que la serie ha puesto de manifiesto es la adicción al cigarrillo de Roberto Gómez Bolaños desde muy joven. Son numerosas las escenas que lo muestran en su casa o en su oficina, siempre con un cigarrillo en la mano, ya sea creando guiones o conversando con su equipo. Este hábito, tan presente en su vida durante décadas, fue precisamente el tema central de su última entrevista, una charla íntima que sostuvo vía webcam con la periodista Adela Micha.

En esa conversación, que ha sido ampliamente comentada por los internautas, Chespirito reveló que había logrado dejar el tabaquismo más de una década antes de su fallecimiento. Sin embargo, las consecuencias de esos años de adicción ya habían cobrado un precio en su salud. El comediante más famoso de la televisión humorística, como solía presentarse al inicio de sus programas, habló abiertamente sobre sus problemas pulmonares, una condición que él mismo atribuyó directamente a los excesos de su juventud y a su prolongado hábito de fumar.

La entrevista con Adela Micha es la misma en la que muchos cibernautas han notado la presencia de Florinda Meza, su esposa, quien lo acompaña y en un momento dado le llama la atención, pidiéndole que se disculpe con sus interlocutores por su falta de habilidad con la tecnología. Chespirito, con humildad, se definió a sí mismo como “inhábil” en ese aspecto.

La Confesión: “Tengo los Bronquios Hechos Camote”

Luego de ese breve intercambio, la conversación se centró en el impacto del tabaquismo en su vida. Con una voz pausada y un semblante frágil que evidenciaban el desgaste físico que enfrentaba en ese momento de su vida, Gómez Bolaños pronunció la cruda confesión: “Yo cometí la estupidez más grande que puede cometer la gente, fumar. Luego mi hazaña mayor fue haber dejado de fumar. Lo hice hace 17 años”.

Lejos de ocultar su vulnerabilidad o de buscar excusas, Chespirito se mostró sincero y profundamente autocrítico. Reconoció abiertamente que su salud era delicada y que dependía de cuidados constantes para sobrellevar el día a día. Expresó con una franqueza dolorosa que su adicción al cigarrillo le había quitado años de vida y había destruido sus bronquios. Con una expresión coloquial pero contundente, sentenció: “Tengo los bronquios hechos camote”. Esta frase, tan característica de su humor, pero dicha en un contexto tan personal y serio, resonó profundamente con quienes lo escucharon.

Las palabras de Chespirito en esta última entrevista son un poderoso recordatorio de las consecuencias de las adicciones y, a la vez, un testimonio de su honestidad y humanidad. A pesar de haber sido un genio de la comedia, no dudó en mostrarse vulnerable y arrepentido, dejando una lección valiosa para sus millones de seguidores en todo el mundo.